En un País, con cuatro millones y medio de parados, undidos en una profunda crisís económica, con la columna vertebral azotada por el cáncer del terrorismo y la intolerancia de unos cuantos, durante unas horas todo se olvidó y reinó la alegría, la concordia, la democracia, la tolerancia, el respeto...
¡Todos fuimos felices! No importaba la raza, la religión, las ideas políticas, la posición social ni económica. ¡Eramos Campeones! ¡Todos Campeones! ¡ Todos arropados por una misma bandera, por unos mismos colores! ¡Nuestra bandera! ¡La de todos los españoles! La tuya y la mia, aunque no hayas nacido en este País, pero vives y trabajas en él, ¡También eres español como yo!...
Gracias al deporte se consiguió esto. Gracias al futbol, que cumplió una de sus máximas la de "ser un deporte de masas"...
Desde este blog, mi agradecimiento y felicitación a la Selección Española de Futbol, por conseguir tanto, en tampoco tiempo.
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